lunes, 15 de enero de 2007

El caminito de tierra

Hace un par de meses, me decidí. Para no correr riesgos inmediatos, esperé a que hubiéramos terminado nuestra libidinosa sesión de viernes por la noche, y largué la pregunta que rondaba hacía semanas en mi entrepierna:

- ¿Te gusta el sexo anal?
- No sé, ¿a ti?

Lo pensé unos segundos. Mi única incursión por la puerta trasera había sido años atrás, auspiciada por Mr. X. Para entonces, y recién iniciada en las luchas cuerpo a cuerpo –con él, por cierto-, no conocía ni de oído los gajes del oficio anal. Le di el vamos con toda la ingenuidad del mundo, apenas lo insinuó.

De eso, solo recuerdo una embestida directa y un agudo dolor que me hizo chillar como becerro, primero, y enmudecer en sudor frío, después. No sé si me fui a negro o el martirio duró poco, pero apenas me liberé del peso de Mr. X, partí al baño jurando no volver a pasar por algo así en mi vida. Los pololos que siguieron después se quedaron sin verle ese ojo a la papa, a pesar de las insistencias y ruegos.

Por eso, cuando Boyfriend contrapreguntó, le susurré un “no sé”. No había veredicto posible de mi parte con una experiencia tan única y lejana, y Mr. X no iba a definir mi futuro en esas lides.

En todo este tiempo, y a diferencia de otros, Boyfriend nunca me ha pedido nada entre las sábanas. Por eso, me armé de valor y lancé la pregunta sin rodeos, con el corazón a mil y las tripas trenzadas en nudos ciegos. Su dedo llevaba meses explorando mi ducto irregular, consiguiendo, quién sabe cómo, que la gracia no solo me agradara, sino que además subiera mi temperatura corporal a grados nunca antes vistos.

Pasó una semana desde mi insinuación. Fueron días en que me esperaba un “ahora ya” de parte de Boyfriend, pero nada. Me lo imaginaba despertando una mañana y sugiriéndome coqueto un “Esta noche podríamos…”, pero no. No hubo previas ni menciones al tema hasta que, después de una ronda de tragos en un bar, volvimos a casa con los ánimos caldeados. Las prendas volaron. Los juegos previos se agotaron. Quedé tendida sobre mi estómago, con Boyfriend en la retaguardia. Quise entrar en pánico pero el alcohol me amortiguó. Cerré los ojos para una acometida escalofriante, pero sentí un dedo jugar en la zona de batalla, presionando con variada intensidad. Empecé a relajarme, y pronto fueron dos los dedos rondando la apertura del caminito de tierra.

Pasaron 30 minutos. Comencé a disfrutar, y mi humedad creciente me delató. Boyfriend se acomodó y sentí cómo se introducía suave y sin prisas, alejado de todo recuerdo de Mr. X. Nuestras respiraciones se tornaron rítmicas, y su penetración se volvió más honda e intensa. Sentí placer.

No sé cuántos minutos pasaron, ni hasta dónde me penetró. Solo sé que no llegamos hasta el final. Balbuceé un “no doy más” y él se retiró.

- ¿Te gustó?, le pregunté.
- Mucho, ¿y a ti?
- También, le sonreí sincera.

Definitivamente, y de a poco, habrá una próxima vez.

18 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde que comencé con mi vida sexual siempre los hombres me preguntan si quiero sexo anal... A mi personalmente no me gusta... No se... Lo del caminito de tierra para mi aun es un tema vedado... Bueno, tal vez aparezca un hombre

Anónimo dijo...

Jajajjaja en cambio,a diferencia de alma el caminot de tierra fue la opcion la chance, la isntnacia y la venitiunica opcion..

Si bien al principio fue terrible.... reo q tb tuve un Mr. X solo q este fue penkita y no duro mas de 10 minutos...

con el tiempo, la cofianza, las emociones, los nuevos prospectos fueron mucho mejor exponentes..

Me gusto el escrito...

Recorde un poco mi "inocencia" q por ahi debe andar..

Saludos


nikin

RIPNE dijo...

Jajajajaja, impresionante el título de tu blog... Notable, notable. La linkié y seguro que será el próximo recomendado porque esto deben leerlo las demás chicas.
Que notable que notable. Si sólo supieran que el placer que nos regalan no es sólo nuestro y se relajaran sería tan increíble como cuentas.
Al amor de mi vida la dejé por eso, jajajaja. Su actual marido sufrirá las consecuencias del ruego.
Saludos desde Conce, que notable visita. Me hago habitué y sigo escudriñando archivos.

Un vicio mas...Tu vicio. dijo...

excelente tema, y mejor aun como lo escribes..de verdad, muy entretenido....

no se, para mi la experiencias sobre sexo anal han sido pocas, y comenzaron en españa cuando una tipa me lo pidio, y de hecho me dio buenas indicaciones como hacerlo mejor...aca en chile, pocas mujeres lo piden, lo cual no se si sera por verguenza o miedo...

en fin, lo importante que es seea de mutuo acuerdo, y que nosotros (los hombres) tratemos el tema con la delicadeza que se merece (mas aun cuando es la primera vez de la mujer) y que sea sutilmente lento, hasta que todo los musculos del ano femenino esten correctamente dispuestos....

gracias por el blog y por haberte descubierto en este mundo virtual...abrazos y besos infinitos...

Anónimo dijo...

Jjejej ..wen relato!!!

Hugs

Jorge Saavedra dijo...

Bien lubricante tu Blog...

Futbolero_mayor dijo...

Excelente historia. Llegué acá por el recomendado de Mister Pinto y parece que voy a traer a mi señora para que lea atentamente, jeje.
Saludos

José Luis dijo...

la verdad creo que eres muy jugada y bueno parece que boyfriend la supo hacer..... me gustó mucho tu historia y la manera de contarla, sin detalles externos, solo el tema central importa.
te leere de nuevo Marilú, sabias que hay una canción de Edith Piaf que se trata de una chica llamada Marilú.
besos.

Marilú dijo...

Chiquillos + chiquilla:

Gracias por los comentarios, me encantó la variedad de opiniones que salió de este temita. Coincido con Goodbyelenin en que el asunto debe ser de mutuo acuerdo y -ojo- sin presiones... No le pidan ni presionen a sus parejas, y verán cómo consiguen más de lo que esperaban ;-)

Y jamás digan "de esta agua no beberé"!!!

Ripne: Muchas gracias de nuevo por recomendarme, eres total!!!

Besos a todos.

CERATIEGO dijo...

Oiga, oiga, pero qué esta diciendo. Ajajajajaja, le voy a preguntar a Kenita si este año vamos a ir a Detroit, ajajajaja, ajajajaja

Flor dijo...

Igual es un tema el sexo anal. Yo lo comencé sólo por curiosidad, y la verdad es que no me arrepiento. Leí tu pregunta en el blog de Bufón, y te voy a dar el mismo consejo que me dio un amigo gay: hay que comer muy liviano y tratar de hacer todo lo que hay que hacer antes... jajajajajaj... tú entiendes.
Besos

Flor dijo...

Jajajaja... parece que a todos nos bajó la idea de hablar del sexo anal!!!!!!! Jajajaja... acabo de publicar algo similar. De ahí compartimos experiencias.
Saludos

Beto_Torres dijo...

Pucha el temita oiga. Pero como dijo el Mister Pinto entre ponerle y no ponerle, mejor ponerle.
Que bueno que una chiquilla hable de estas cosas porque aún muchas tiene el asunto medio vetado consigo mismas. Las cabras más chicas cumplen quince y, con todo respeto, "ya lo soltaron".
Es un tema serio, con altura de miras pues está lejano a la perversión.
Muy buen escrito el que encontré por acá.

Anónimo dijo...

Primera cosa: Me gusta mucho como escribes, creo q capta la atención rápidamente y hace que te leas el post completo y no buscando las típicas frase califas que que hablan de sexo.
Segundo: Siempre me ha tincado la idea del caminito de tierra, pero, lógicamente, creo q tiene q ser con respeto. No quiero quedarme atravesada y no poder sentarme en tres días. jajajaja.
Tercero: Oye, q buen nombre "El caminito de tierra". Eso si, te encargo cuando vaya al campo, me cagaré de la risa.
Saludos.

Isabel
www.alasparaisabell.blogspot.com

Pinkerton dijo...

Para hacer literatura erótica se necesita un mínimo de elegancia.

Anónimo dijo...

No sé por qué razón se considera al sexo anal un tema tabú...yo lo encuentro lo más natural del mundo ¿¿??

Anónimo dijo...

que buena!!! me he reido mucho c lo que escribes, re entrete y sincero, bien!!! yo nunca lo he hecho por el camino de tierra, cada vez que algun muchachito se pone creativo c eso, prefiero pasar, por que me acuerdo de cuando deje de ser virgen y casi me muero de dolor, por ditroit debe ser pero!! no em atrevo.


un abrazo.

nikia

Anónimo dijo...

En mi caso, desde que experimenté el sexo anal a sabiendas de sus implicancias y preparacion para tenerlo, me encanta...mi pareja es el mas complacido, ya que de paso el morbo que le genera el gusto de mi parte y no considerarlo una agonía, nos hace disfrutar a ambos de nuestra vida sexual..lo que sí, averiguen antes y haganlo con alguien que se de el tiempo de prepararlas para disfrutar de esta experiencia, que de por si trae bastante placer, no solo al hombre, sino que tambien a nosotras las mujeres